

Fotos: Raúl Peralta
Por: Carolin Almonte
De origen inglés y profesión pastelero, especializado en gerencia hotelera; Nigel Cook con solo 48 años de edad ha recorrido el mundo, y no precisamente conociendo cada país como turista, sino, aprovechando las oportunidades que le brinda trabajar en una cadena hotelera de lujo como lo es JW Marriott.
Cook siempre ha sido un hombre trabajador, inició su carrera profesional como pastelero en Londres, posición que desempeño durante 20 años, lleva 17 años de labor en la lujosa cadena hotelera JW Marriott ocupando diversas posiciones en distintas partes del mundo.
Su primera experiencia fuera de Londres fue en Egipto, donde duró dos años laborando como pastelero, luego viajó a Macao una región que se encuentra 70 kilómetros al suroeste de Hong Kong; de ahí se trasladó a China por tres años y medio, continuando su recorrido por Bahamas, en 1998 llegó México a trabajar en JW Marriott, luego Costa Rica y Perú.
La última parada de su recorrido por el mundo es Santo Domingo, República Dominicana, donde se sumerge en la dirección del décimo segundo hotel JW Marriott en que ha laborado en 17 años, y que describe como un gran reto, cuyo resultados se empezaron a ver a las cinco semanas de inicio de operaciones, cuando el JW Marriott alcanzó el primer lugar entre los 75 hoteles de la ciudad de Santo Domingo.
Iniciar desde cero, contratar personas, comprar equipos, son solo algunas de los retos a los que Cook se ha enfrentado en el país y los que señala como una experiencia única y bonita que le brinda la oportunidad de impregnar su propia marca, refiriéndose a cada hotel que inicia a operar.
- Niger Cook
Poder agregar nuevos detalles y modificar parámetros de acuerdo a las necesidades del cliente son de las cualidades de su trabajo que más le satisfacen: “El mundo sería aburrido si todos quisiéramos lo mismo y fuéramos iguales, no habría emoción”, explica para justificar la necesidad que tiene en su jornada diaria de mejorar los servicios que se brindan en el lujoso espacio que promete un ambiente acogedor donde el cliente puede relajarse y ser él mismo. “Nuestra misión es lograr al cien por ciento la satisfacción del cliente”, expresó.
“La parte bonita de mi vida es tener un trabajo que me encanta, me gusta, y encima tengo la oportunidad de conocer otros países, otras culturas, otras personas… soy feliz porque hago lo que realmente me gusta”, afirma con emoción.
Nigel Cook es un hombre que le gustan los retos, que ama lo que hace, y que a cada experiencia busca sacarle el máximo provecho; se considera una persona abierta al cambio y por demás, comunicativo, dispuesto a escuchar y modificar lo que sea necesario para lograr la satisfacción plena del cliente que utiliza los servicios que brinda JW Marriott, donde el huésped puede disfrutar de una comodidad genuina.
Con solo un año en el país Niger Cook siente que lleva toda una vida. Según él, le ha sido fácil adaptarse gracias, en gran medida, a la amabilidad de la gente y al estar realizando una labor que disfruta. A pesar de no haber tenido la oportunidad de disfrutar de las bellezas que tiene la República Dominicana, Cook confiesa que le encanta el país, y que espera la ocasión para poder disfrutar de cada rincón de la isla.
Se confiesa un hombre arriesgado, va más allá de su zona de confort. Como un buen líder le gusta compartir su experiencia con su equipo, procura enseñar todo lo que sabe, utiliza sus experiencias para poder enseñar a los demás.
El principal reto de Niger Cook en el país es hacer del JW Marriott Santo Domingo el número uno de la cadena: “Estoy seguro que con el equipo que tenemos vamos a lograrlo”.
El lema de servicio que Cook emplea en JW Marriott y que insta a su personal a realizar es el de tratar a los huéspedes como si estuvieran en casa: “Nadie es mal atendido en su casa”, sugiere. La diferencia entre un hotel cualquiera y el JW Marriott es la vocación de servicio, que junto a sus valores hacen de JW Marriott los mejores lugares para vivir y trabajar.